Conoce las acciones que las organizaciones peruanas deben adoptar ante la aprobación del nuevo Plan Nacional de Acción sobre Empresas y DDHH 2021 – 2025.
Las empresas de hoy en día, independientemente de su tamaño y sector, tienen la responsabilidad de evitar y enfrentar las consecuencias negativas de sus acciones a nivel social, medioambiental y en su cadena de suministro. La adopción de los “Principios Rectores sobre las Empresas y Derechos Humanos” de las Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha dado origen a un nuevo escenario en la gestión empresarial.
En este contexto, para poder garantizar la correcta gestión de las empresas surge el Plan Nacional de Acción sobre Empresas y Derechos Humanos 2021- 2025, un marco para concretar políticas públicas que velen porque el Estado y las empresas apliquen los principios rectores y protejan los Derechos Humanos en su ámbito de acción.
En nuestro país, el sector empresarial ha mostrado indicios de seguir avanzando en temas de Responsabilidad Social Empresarial y reconoce que los Principios Rectores se han convertido en el principal marco en materia de empresas y derechos humanos, demostrando el rol y responsabilidad tanto del Estado como del sector empresarial. Por ello, el nuevo Plan Nacional de Acción sobre Empresas y DDHH ha sido elaborado por 132 entidades pertenecientes al estado, empresas, sociedad civil, pueblos indígenas u originarios, sindicatos y organismos internacionales y de cooperación internacional.
El Plan Nacional de Acción sobre Empresas y DDHH contiene lineamientos estratégicos que engloban la visión del Perú al 2050. Tanto el sector privado como el público deben garantizar el cumplimiento de estos, pero ¿Cuál es la labor de la empresa?
- Las empresas deben hacer respetar los derechos y promover la no discriminación del pueblo afroperuano, los pueblos indígenas u originarios andinos, pueblos amazónicos y deben brindar protección necesaria en casos de racismo.
- Todas las organizaciones, públicas o privadas deben promover los derechos y no discriminación de las personas migrantes extranjeras.
- Las empresas deben promover la conciliación de la vida familiar y laboral en los centros de trabajo.
- Se deben garantizar las condiciones para el acceso y permanencia de las personas adultas mayores en el mercado laboral.
- Garantizar el acceso al trabajo y desempeño de labores, en igualdad de condiciones a las personas con discapacidad y personas pertenecientes a la comunidad LGTBI.
Las empresas deben cumplir todas las leyes aplicables, respetar los DDHH y abstenerse de infringir los DDHH de terceros. En esa línea y para mejorar la gestión de riesgos, las empresas deben institucionalizar sus compromisos en una Política de DDHH, contar con mecanismos de debida diligencia, garantizar mecanismos de reclamos, evaluar los DDHH en la cadena de suministro y contar con mecanismos para hacer frente a las consecuencias negativas cuando se produzcan estas situaciones.
La aprobación del Plan Nacional se convierte en un hito para el país y representa un avance importante en materia de respeto por los derechos humanos y la diversidad. Se espera que las empresas empiecen a tomar las medidas necesarias para liderar el cambio garantizando el cumplimiento de estas acciones. De esta manera, cada vez serán más las organizaciones peruanas que cumplan con los Principios Rectores y que velen por el cumplimiento de los derechos humanos.